El carpooling es una práctica de transporte compartido en la que varias personas utilizan un mismo vehículo privado para hacer un trayecto similar, generalmente organizado de manera informal o a través de aplicaciones digitales.
Según el Sistema de Información Turística de Argentina (SINTA), durante el período 2019–2023 las conexiones CABA–Rosario, CABA–Mar del Plata y San Miguel de Tucumán–Santiago del Estero figuraron entre los corredores con mayor movimiento del país.
La nueva ruta busca conectar dos polos urbanos clave con una alternativa que ofrece ahorro, comunidad y sustentabilidad. Según estimaciones de Viatik, el trayecto podría registrar un aumento significativo del uso compartido, permitiendo reducir los costos de viaje y aprovechar mejor los asientos disponibles ofreciendo una experiencia simple, social y confiable, con viajes puerta a puerta o desde puntos de encuentro convenientes, que combinan comodidad, ahorro y sostenibilidad.
Un viaje individual desde Buenos Aires a Rosario cuesta en promedio unos $50.000, considerando combustible y peajes. En comparación, un pasaje en ómnibus ronda los $30.000, mientras que compartir un asiento a través del carpooling tiene un valor aproximado de $14.500, lo que representa un ahorro superior al 50 % frente al transporte tradicional.
En la ruta Buenos Aires–Mar del Plata, los usuarios también pueden reducir a la mitad sus gastos: el precio promedio por pasajero es de $24.000 al compartir el auto con dos o tres personas.
En el contexto regional, el carpooling se consolida como una de las tendencias de movilidad colaborativa de más rápido crecimiento en América Latina. Según un estudio de MarkNtel Advisors, consultora internacional de investigación de mercados, el mercado latinoamericano de viajes compartidos alcanzó un valor de USD 93,7 millones en 2023, con una tasa de crecimiento anual proyectada de 22,7 % entre 2024 y 2030. Este avance refleja una adopción acelerada de modelos de movilidad más económicos, digitales y sostenibles, especialmente entre los usuarios jóvenes urbanos. Si bien Brasil lidera el desarrollo regional, con una de las comunidades más grandes de carpooling del mundo, está creciendo su utilización en mercados como Argentina, Chile y Colombia, impulsado por el aumento del costo del transporte individual y la conciencia ambiental.
Durante 2025 y 2026, la empresa planea ampliar sus rutas nacionales, reforzando la conexión entre grandes ciudades y destinos turísticos como la triangulación de Mar del Plata, Rosario y Buenos Aires, además de seguir potenciando su comunidad de conductores y pasajeros.
“Nuestro crecimiento no se mide solo en cantidad de usuarios, sino en cómo la gente elige moverse. Cada viaje compartido es una historia y una conexión que cambia la manera de estar en la ruta”, señala Gonzalo Aszyn, CTO de Viatik.