China está fabricando e instalando robots de manufactura a un ritmo mucho mayor que cualquier otro país, con los Estados Unidos como un tercero distante, fortaleciendo aún más el papel global ya dominante de China en la fabricación de todo tipo de artículos.
Había más de dos millones de robots trabajando en fábricas chinas el año pasado, según un informe publicado por la Federación Internacional de Robótica, un grupo sin fines de lucro para fabricantes de robots industriales. Fábricas en China instalaron casi 300.000 robots nuevos el año pasado, más que el resto del mundo combinado, las fábricas estadounidenses instalaron 34.000.
En todo el mundo, los robots y la inteligencia artificial están desempeñando un papel cada vez más destacado y disruptivo en la fabricación. Los robots para fábricas van desde máquinas que sueldan piezas de automóviles hasta garras que levantan cajas sobre cintas transportadoras. A medida que la tecnología ayuda a las fábricas a ser más eficientes, algunos se las están arreglando con menos trabajadores y alterando los roles de otros.
El impulso de China por la automatización de fábricas ha sido una parte clave para lograr su posición como la potencia manufacturera del mundo. Las fábricas en China han instalado más de 150.000 robots cada año desde 2017 en promedio.
En 2015, Beijing convirtió en una prioridad máxima para China convertirse en competitiva a nivel mundial en robótica como parte de su campaña Made in China 2025 para importar menos productos manufacturados avanzados.
Las empresas en China "están utilizando la IA para entrar y decir qué máquinas están funcionando muy bien y cuáles están un poco fuera", dijo Cameron Johnson, un consultor de Shanghai especializado en automatización.